24/11/2020
23:50
Aún cuando queda para la aprobación de cualquiera de los dos proyectos que buscan habilitar el sacar una parte de los fondos personales en las AFP, la mayoría de las personas ya tiene más o menos definido en qué se irá dicho monto.
Luego que fuera aprobado en su primer paso legislativo el segundo retiro de otro 10% de los fondos de capitalización individual, el gobierno ingresó su propia iniciativa que buscaba emular las características del primero, pero con algunas distinciones.
Sin embargo, no pasó mucho tiempo para que la moción presentada por el Ejecutivo fuera modificada mediante indicaciones que la dejarían virtualmente idéntica al otro proyecto de reforma constitucional.
De esta manera, es posible que, independiente de cuál se apruebe, se concrete un segundo retiro del 10%.
En las calles, las personas aseguran que de poder retirarlo lo destinarán al pago de dudas, ahorro o inversión. En general, todos tienen relativamente claro en qué lo ocuparán.
Del lado contrario, en el comercio ya comienzan a adelantar cuáles serían los sectores que se verían más beneficiados tras un segundo retiro.
Lee también: Diputado Jürgensen renunció a RN con críticas al retiro del 10%: "Es la peor política pública de los últimos 30 años""Por distintas razones, el comercio se verá beneficiado", dice Jean Paul Quinteros, economista y académico de la Universidad Central. "Ya sea por bienes asociados a las compras de regalos navideños o gente que necesita comprar implementos para el teletrabajo".
Por su parte, Cristián Echeverría, economista y académico de la Universidad del Desarrollo, prevé que los electrodomésticos pueden registrar un alza en sus ventas, mientras que el sector automotriz también podría tener un incremento.
Asimismo, George Lever, gerente de estudios de la Cámara de Comercio de Santiago, asegura que el pago de deudas será mayoritario, sobre todo considerando que diciembre es un mes en que el movimiento crediticio "es importante".
En este sentido, el segundo retiro tendría sus diferencias con el primero, en el cual el destino del dinero estuvo más enfocado a las necesidades urgentes de las personas. Ahora, señala Quinteros, "hay más posibilidades".
