La víctima, junto a su esposa e hijo de 3 años, estaba llegando a su casa cuando entabló una discusión con dos motoristas. Uno de ellos utilizó una daga para herir al padre de familia, quien falleció casi instantáneamente tras este ataque. Los involucrados fueron detenidos, pero solo uno de ellos se mantiene en prisión preventiva.
El pasado martes 7 de septiembre, Gabriel Coronado de 39 años, fue asesinado en la puerta de su casa cuando volvía junto a su hijo de 3 años y su esposa de haber comprado una torta para la celebración del cumpleaños de ella. El conflicto se originó cuando él estaba estacionando el vehículo, momento en que aparece una moto con dos ocupantes que dificultó sus maniobras. Se trenzaron en una pelea que terminó con uno de los sujetos hiriendo a Gabriel justo en su pecho, mediante el uso de una daga. La víctima huyó hacia una plaza, siendo perseguido por otro individuo, pero al ver que éste se desplomó, decidieron huir a bordo de la moto. Diligencias de la Brigada de Homicidios y funcionarios de la PDI, lograron dar con el paradero de los responsables: Moisés Vergara y Gregorio Pino. Ambos fueron detenidos, y durante la incautación de sus pertenencias, llamó la atención un casco de tipo alemán que uno de ellos portó en el altercado. Según revelaron, ambos son simpatizantes neonazis. Gregorio quedó con prisión preventiva y Moisés con firma quincenal, arraigo y prohibición de acercarse al domicilio de la víctima. Pero la familia afectada no quedó conforme con esto. "Son unos asesinos , porque fue una puñalada directo al corazón, y el segundo también estaba con un cuchillo", argumenta Alexandra Román, esposa del fallecido.