Los eventos, que se llevan a cabo todos los martes y jueves, revelan un gran nivel de organización. Hay venta de drogas, bebidas alcohólicas por montón y hasta carritos de comida.
Vecinos de Maipú reclaman por carreras de autos clandestinas que se llevan a cabo durante las noches, todos los martes y jueves desde hace meses. Se reúnen cerca de doscientas personas por jornada, en las que además suelen haber peleas entre ellos, según denuncian los residentes del sector.
Hay venta de drogas, bebidas alcohólicas por montón y hasta carritos de comida. Todo organizado, específicamente en las calles Monseñor Valech con los Yacimientos.
El problema es que, además de la clara exposición a contagios de COVID-19 entre los asistentes, estas carreras no solo ponen en riesgo a quienes participan en ellas o llegan como público, sino también a todo quien transite por ese sector.
Lee también: Detienen a 27 personas que estaban en playa de Talcahuano pese a cuarentenaÓscar, un trabajador de la zona, asegura que "es increíblemente peligroso, porque los tipos parten de ahí, hacen rechinar los neumáticos, hay polvareda, humo y parten a 80 o 100 (kilómetros por hora) y la gente parada ahí al lado en la cuneta. Es terrible. Imagínate, un desvío cualquiera y se genera una tragedia de proporciones"
Los martes y jueves a las nueve de la noche comienzan a juntarse. Las carreras o piques clandestinos se extienden hasta cerca de las once, eso depende de la llegada de Carabineros. Si no se acercan al lugar, fácilmente pueden quedarse hasta la una o dos de la madrugada.
La organización es máxima. Cualquier creería que para intentar pasar desapercibidos minimizarían los ruídos o la cantidad de personas. Pero nada de eso, ya que se siente fuerte el rugir de los motores y los parlantes con música.
Lee también: Expertos evalúan replicar plan “Fondéate en tu casa” para celebraciones de Navidad y Año NuevoAl ver la presencia de Carabineros quienes participan de estas locas y clandestinas carreras huyen del lugar, poniendo nuevamente en riesgo la integridad de todo aquel que se cruce en su camino.
Desde el municipio dicen tener conocimiento de lo que está ocurriendo y lo ven con preocupación. Gonzalo Huenumil, coordinador de Maipú Seguro, señaló que estos eventos "no se pueden realizar primero porque ponen en riesgo a la comunidad en general y no están permitidas para que se realicen en la vía pública. Entonces en ningún contexto estas actividades están permitidas y deben ser fiscalizadas por Carabineros y también por nuestros inspectores municipales".
Lamentablemente en Maipú en julio del años pasado hubo un grave accidente de tránsito que se originó a raíz de carreras clandestinas. En esa oportunidad se instalaron reductores de velocidad, pero los organizadores los sacaron. Ahora las autoridades dicen que volverán a tomar medidas.
Lee también: Uso de mascarilla obligatorio en las playas: “Se están protegiendo ustedes y también a los demás”"Nosotros pensamos, ahora que han vuelto este tipo de actividades, en instalar nuevamente reductores de velocidad e incrementar la fiscalización del control, coordinado con Carabineros y con personal municipal", agrega Huenumil.
La presencia de la autoridad solo consigue alejarlos por algunas horas, máximo un par de días. Es un problema sanitario pero también de seguridad.