La situación sanitaria del país sigue siendo un tema de extrema preocupación para autoridades, especialistas y trabajadores, quienes han asegurado que están “al límite” en los diversos recintos sanitarios.
Debido a este motivo, el Ministerio de Salud decidió que toda la Región Metropolitana vaya a cuarentena nuevamente, medida valorada por diversos especialistas.
En este marco, el integrante de la Confederación Nacional de Trabajadores de la Salud (Fenats) y funcionario del Hospital San José, Luis Morales, afirmó que “no estamos colapsados, pero si estamos al tope. Si llegase a aumentar de aquí a la noche con 10 o 20 pacientes, llegaríamos al colapso”.
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“Colapso es cuando nosotros no tenemos dónde trasladar pacientes, en esa circunstancia se busca el traslado para desocupar camas, pero hoy la red asistencial está toda copada, entonces es muy difícil”, explicó en conversación con Rafael Cavada.
Respecto a la posibilidad de trasladar pacientes contagiados de COVID-19 a otros recintos en diversas regiones, Morales aseguró que “nosotros como Fenats hemos dado un diagnóstico clarísimo respecto a que están todos los hospitales colapsados de sur a norte, entonces el sistema público no está funcionando para entregar condiciones a los pacientes. El extra sistema (recintos privados) también está colapsado”.
En cuanto a las soluciones para esto, el trabajador del Hospital San José apuntó: “en concreto, es que se ponga tajo a que no sigan aumentando los contagios”.
“No están los recursos físicos ni humanos para poder absorber esta demanda. Se requieren monitores y camas, pero el problema es que no hay donde colocarlo, tampoco tenemos el personal especializado que se requiere para atender este tipo de pacientes”, añadió.
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Finalmente, Luis Morales detalló que “el recurso humano (que se necesita) es mano de obra especializada, entonces no cualquier persona puede entrar ahí. Además, el personal lamentablemente prefiere a lugares donde son mejor pagados, porque los sueldos en el sector público son malísimos. Los trabajadores quedando están reventados”.
“Lamentablemente la población piensa que los trabajadores (de la salud) es como ir a una fábrica, instalarse detrás de una máquina, producir y luego volver a su casa y seguir la vida, no. El trabajador de la salud es muy distinto, aquí hay gente que vio morir a sus propios compañeros, veo gente de sectores pobrísimos que llegan con esperanza de vida y no se puede hacer nada, eso afecta sicológicamente”, concluyó.
12/06/2021
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