La decisión fue tomada en medio de la polémica que protagonizó en la final del Mundial femenino, donde besó sin su consentimiento a la jugadora Jenni Hermoso.
Luis Rubiales, hasta hora presidente de la
Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y suspendido durante 90 días por la FIFA,
anunció durante esta jornada su renuncia al cargo.
La decisión se da en medio del
conflicto provocado por el mismo Rubiales en la final del Mundial femenino de Australia y Nueva Zelanda, cuando se tocó los genitales en el palco y le
dio un beso en la boca a la jugadora Jenni Hermoso en plena entrega de medallas.
A través de un comunicado, publicado en su cuenta de X (ex Twitter), señaló que "
hoy he transmitido a las 21:30 horas al presidente en funciones, D. Pedro Rocha, mi renuncia al cargo de presidente de la RFEF", asimismo, le informó que ha hecho lo propio con su cargo en la UEFA para que su puesto como vicepresidente sea reemplazado.
"Tengo fe en la verdad y voy a hacer todo cuanto esté en mi mano para que prevalezca", agregó en su comunicado.
A su vez, el presidente interino de la RFEF, Pedro Rocha, señaló que ante “la veloz suspensión provisional por parte de la FIFA durante 90 días y los demás procedimientos abiertos contra él,
entiende que es evidente que no podrá volver a su cargo, por lo que insistir en
quedarse a la espera y aferrarse al cargo no contribuirá a nada positivo ni a la propia RFEF ni al fútbol español”.
Ante su partida, Rubiales expresó convencido que la decisión traerá la “
estabilidad necesaria que permitirá que tenga éxito la candidatura de España, Portugal y Marruecos al Mundial de 2030”.