Gran Hermano puso a prueba nuevamente a los habitantes de su casa y
los desafió con otro juego del congelado. Por lo mismo, los participantes quisieron dejar listos su pendientes antes de que sonara la chicharra y quedaran inmóviles, sin embargo a
Coni no le resultó la jugada y
quedó a mitad de su ducha cuando sonó el primer timbre. ¡Mucha atención, ya que habrá sanción para quienes se muevan o conversen!