La influencer llegó hasta la clínica en donde está internado su padre para acompañarlo durante las festividades. Además, a través de redes sociales, recordó la muerte de su abuela y reflexionó sobre el año, catalogándolo como "horrendamente difícil".
En un año particularmente complejo para la familia Calderón-Argandoña, a finales de octubre, el abogado Hernán Calderón tuvo que ser inducido a un coma para ser intubado debido a las complicaciones que le trajo el COVID-19.
Durante estos meses, el abogado ha estado particularmente acompañado por su hija, Raquel "Kel" Calderón y la noche buena no fue la excepción. La influencer llegó hasta la clínica en donde está internado su padre para sorprenderlo y pasar la noche buena y Navidad junto a él.
Por lo mismo, a través de redes sociales, reflexionó: "No voy a mentir, este ha sido un año horrendamente difícil para mí. Esta navidad tiene un sabor sumamente extraño, hoy no hay vestidos de fiesta ni comidas con muchos invitados".
Lee también: Kel Calderón en el funeral de su abuela: "Tuviste la garra para ser mi familia completa cuando yo no tenía a nadie"Posteriormente, recalcó que "aún así seguimos aquí, y aunque diferente, estamos recordando a los que nos dejaron (mi abuelita) y disfrutando a nuestro papá que aunque débil aún está con nosotros, al parecer ganando una de las batallas más rudas de su vida".
"Sólo quería decirles a todos los que están extrañando a un ser querido que perdieron este año, o los que están pasando esta noche con un familiar enfermo o complicado de salud ya sea por la pandemia o por otro motivo, no están solos", manifestó Kel.
En ese punto, recordó que son muchas las personas que han perdido a alguien y estas fechas se vuelven un poco más complejas: "En el corazón, esta noche estamos juntos, los pienso y los siento, los entiendo".
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