Ana Villarín, que trabajó con el artista mexicano en 2019, contó varias particularidades en su periplo con el intérprete. “No es un artista fácil. Es mucha responsabilidad”, dijo en una entrevista.
Una curiosa situación reveló una ex trabajadora del popular cantante mexicano Luis Miguel, quien nuevamente hace noticia por sus excentricidades y requisitos.
Se trata de Ana Villarín, también oriunda del país azteca, que estuvo en 2019 estuvo relacionada con el artista por pertenecer a una productora asociada al intérprete, por lo que tuvo la oportunidad de verlo más de cerca.
La joven relató que uno de los requisitos que pedían para integrarse al equipo era firmar un acuerdo de confidencialidad, además de saber inglés, tener buena voz de comunicación y ser atenta.
Lee también: De blanco y al aire libre: La foto del íntimo matrimonio de Denise Rosenthal y Camilo Zicavo
“No es un artista fácil. Es mucha responsabilidad este trabajo”, comenzó relatando Villarín en entrevista con el programa Creadores & Chil, podcast que se transmite por YouTube.
Consultada sobre qué nota le pone a Luis Miguel durante el tiempo que trabajó con él, admitió que le coloca “menos de cero, números negativos”.
“Algo que yo nunca entendí es que cuando llegaba, que aparte llegaba tardísimo siempre y que por eso empezaban siempre tarde sus conciertos, nadie podía estar viéndolo porque no le gustaba. Todos teníamos que voltear hacia la pared”, agregó.
Lee también: ¿Qué saben de corte? Los “pasos prohibidos” de Marcianeke que hicieron estallar Lollapalooza
Es más, Villarín añadió que la situación “era horrible. (Te decían) ‘ya va a llegar, voltéense para la pared para que no lo vean’. Más aún cuando era el tercer día y ya se pasaba toda la emoción que podrías tener. Paras el trabajo de todo el mundo. Es terrible”.