Las destacadas actrices nacionales contaron a CHV Noticias cómo fue el detrás de escena de la película de Bernardo Quesney y se refirieron a la química que ambas comparten, tanto dentro como fuera de la pantalla.
Amparo Noguera y Catalina Saavedra vuelven a trabajar juntas en la nueva película de comedia negra Historia y Geografía, la que se estrenará este 18 de abril en los cines chilenos.
Las actrices contaron a CHV Noticias cómo fueron las grabaciones del filme dirigido por Bernardo Quesney, el detrás de escena y se refirieron a la química que ambas comparten, tanto dentro como fuera de la pantalla: "No nos vemos tanto, pero somos amigas, nos contamos las cosas y nos da risa".
Historia y Geografía es descrita como una "incorrecta comedia dramática que aborda los orígenes de Chile y su identidad actual a través del mundo del teatro".
Dirigida por Bernardo Quesney y con una duración de 93 minutos, la película cuenta la historia de Gioconda Martínez (Noguera), quien fue una recordada actriz de televisión que vuelve a su ciudad natal, San Felipe, para montar la obra de teatro de La Araucana y recuperar el reconocimiento que, según ella, alguna vez tuvo gracias a su personaje de la "Huachita".
Por su parte, Catalina Saavedra da vida a Atenea Martínez, hermana de Gioconda, quien nunca dejó la ciudad y se hizo cargo del centro cultural fundado por su fallecido padre en la comuna.
Frustración, identidad chilena, racismo y comedia son algunas de las temáticas que aborda el filme que también cuenta con la participación del actor haitiano Steevens Benjamin, Pablo Schwarz, Paulina Urrutia y Paloma Moreno.
— ¿Cómo fue la experiencia de trabajar juntas para esta película?
— Catalina Saavedra: Buena. Siempre es buena. Ya habíamos trabajado juntas en teatro y sí, pasa algo que yo creo que hay una empatía y una admiración mutua también. No hay ego aquí. Actuamos, dialogamos, nos reímos, entonces creo que eso se transmite, siempre, no solamente en esta película sino que en las cosas que hemos hecho.
— Amparo Noguera: Opino exactamente lo mismo, deberíamos hacer más cosas. Lo pasamos bien, realmente. Nos conocemos como actrices y como personas. De repente uno conoce a las personas como desde otro lado, que no tiene que ver con el cotidiano, ni con el secreto. Somos de la misma escuela, de Gustavo Meza.
— Esta película es una comedia. Me imagino que ocurrieron muchas anécdotas divertidas...
— AN: Todo es divertido... las escenas en sí eran anécdotas. Los haitianos eran muy simpáticos, muy entregados.
— CS: Los mismos haitianos con sus trajes de mapuche. Hacerla al final de la pandemia también era divertido porque era una película muy barata... Nosotras, porque ya tenemos nuestros años, estábamos en un hotelito, con unas paredes que se sentían todas las cosas de las otras piezas. La Amparo no, estaba en un lugar más arriba, en otro lugar, y ellos (el resto) dormían en el mismo lugar de la locación, con el equipo, entonces se despertaban y estaban allí.
— AN: Era como un internado, muy precario y dormía realmente todo el equipo ahí, entonces se terminaba de filmar. Empezaba el carrete y dormían, se despertaban. Era realmente un reality. Nadie se contactaba con nadie. Nadie salía.
— CS: En general todo muy divertido, pero muy seriamente realizado. Creo que la gracia de la comedia es que se haga con seriedad. Uno los personajes los aborda desde una verdad, desde creer que la situación es real, desde dialogar seriamente aunque estemos hablando de barbaridades. Creo que ahí es cuando resulta la comedia y en esta película creo que está muy bien logrado eso. Es como todo posible.