El ex animador de Los improvisadores contó los motivos por los que tomó la tan importante decisión de su vida, la que lo llevó a vivir a 25 km de distancia de la ciudad más cercana.
Tras su salida de los medios chilenos en 2017,
el conductor de televisión,
Juan José Gurruchaga, comentó su
nueva vida junto a su familia en Santa Fe,
Argentina.
Así lo detalló el animador en el programa conducido por
Julio César Rodríguez,
Síganme los buenos, donde además
contó su vida actual en el país vecino y el desarrollo de su trabajo en los medios trasandinos.
“Tengo el apoyo de la familia de mi mujer. Mis cuñados tienen una empresa familiar allá,
y comencé en este rubro nada que ver con la actuación, entre el campo y la panadería”, expresó.
El ex conductor de
Los improvisadores, detalló que una de las principales razones que lo motivaron a cruzar la cordillera fue el complejo estado de salud de su suegro, pues
“él sufrió un ACV (accidente cerebrovascular) y eso remeció mucho la emocionalidad de mi señora”, señaló.
Además, agregó que
se convirtió en un "hombre de campo" y que se encuentra viviendo a 25 km. del centro de la ciudad: "Aprendí a vacunar animales, a marcarlos, andar a caballo”.
Abordó, también, que
otra de las razones para mudarse al país vecino fue pasar más tiempo con sus hijos, ya que, “estaban recién nacidos, tenían dos y tres años.
Yo quería una mamá fuerte para ellos, que no estuviera preocupada por la distancia”, complementó.
“He cambiado muchas comodidades que no son las mismas que tiene la ciudad”, sinceró el animador, argumentando que también tiene muchas ventajas, “como
levantarte en la mañana y poder mirar en 360° muchas hectáreas que te permiten estar mucho más tranquillo”.
Gurruchaga, también se refirió a
El nido vacío, el programa que conduce junto a
Diego Bazán y que se transmite en el
Canal Vive en Argentina.
“
Estamos entregando un contenido muy valioso, sobre todo para un segmento de la sociedad que quizás está muy abandonado, que tiene que ver con el tipo de 50 años que por ahí queda sin trabajo, que no se atreve a reinventarse”, concluyó.