Ya se cumplieron 3 meses desde que los
18 jugadores de
Gran Hermano ingresaron a la casa más famosa del mundo, situación que mantiene cansada a
Mónica Ramos, la participante más longeva del afamado reality.
Si bien la
comerciante de feria ha dejado en claro que, tras su paso por el encierro, cambiará muchas de sus actitudes con la gente más joven que la rodea,
actualmente no se encuentra con ganas de continuar en la competencia.
Y es que la diferencia de edad con los demás jugadores la está complicando, sobre todo, sintiendo que
“no entiendo a esta juventud”.
Se desahogó con Jorge Aldoney
Tras una breve, pero profunda, conversación con el
ex Míster Chile, la señora Mónica llegó a la conclusión que
desea abandonar la casa, y en vista que se encuentra en placa,
esta podría ser su oportunidad de reunirse con su familia.
Según ha dejado claro la competidora, durante este último tiempo en la casa, no lo ha pasado bien.
“¿Qué les puedo opinar sobre lo que están conversando?”, cuestionó la longeva jugadora, tras una intervención del modelo.
Tras esto,
Aldoney argumentó que entiende la situación que vive Mónica, mencionando que “si a mí que no tengo 50 años menos,
ya estoy hasta el cul…”.
“De verdad que me quiero ir…
Anoche me llamó Gran Hermano y le dije que sí, que
tengo ganas de irme, ojalá esta vez”, concluyó la feriante.
“No quiero que me salven, la gente de afuera tampoco.
Primera vez que siento ese deseo, de verdad”, cerró la anciana.