El primogénito de Fernando Solabarrieta e Ivette Vergara causó estragos en su familia cuando anunció que ingresaría a un reality show, sin embargo, las peleas que esa decisión provocó fueron claves en la reconciliación de sus padres.
El comentarista deportivo protagonizó un emotivo capítulo en compañía de su hijo, Nicolás Solabarrieta, quien también jugó un papel clave dentro de la relación de sus padres.
Solabarrieta relató un complejo momento de su vida, en el que se mantuvo distanciado de Nicolás durante dos meses, debido a que no estaba de acuerdo con su ingreso a un reality show y dicha rencilla facilitó las cosas con Ivette Vergara.
"Un día ella me llama para preguntarme ¿Qué pasa con Nico? 'No me ha llamado, y si él no me llama yo no lo voy a llamar', le dije…. Es una muestra de orgullo desmedido, puede ser, pero era una posición firme de padre, en el sentido que es el hijo que debe dar el paso", argumentó Fernando.
Sin embargo las cosas no habían prosperado entre la pareja hasta el desarrollo de los Juegos Panamericanos, cuando Ivette dio el primer paso.
"Me llamó para darle unos tips como relator, y dije: 'Pu... la chiva mala'. (Ella me dice) "No, si en verdad te estoy llamando por eso". A partir de ahí empezamos a acercarnos y después para los Panamericanos volvimos a estar juntos".Sin embargo, fue Nicolás Solabarrieta el detonante final para arreglar la situación entre ellos, debido a que su participación en el reality show condicionó la reconciliación.
"Te eché una manito", aseguró Nicolás entre risas y Fernando verificó los hechos, comentando que con Ivette Vergara crearon una rutina donde ambos disfrutan juntos de los capítulos donde aparece su hijo.