Sebastián Ramírez fue el jugador que respondió la última de las
seis llamadas del Teléfono Rojo, una actividad que dejó sorpresas en
Gran Hermano Chile. Pincoya, por ejemplo, resultó ganadora de $500 mil; mientras que Raimundo y Scarlette debieron estar al servicio de la casa por 24 horas. En el caso de Seba, este último llamado le permitía
elegir qué compañero quería que se cambiara de pieza durante una semana. Su elección, como era de esperar, fue
Constanza, quien deberá
intercambiar su cama con Hans.