Luego que producto de la crisis social que atraviesa Chile, la Prueba de Selección Universitaria se postergara dos veces, los postulantes se han visto expuestos a mayor ansiedad e incertidumbre. En ese sentido, expertos aconsejan seguir una serie de estrategias que permiten manejar estos factores y ayudar a prepararse.
Luego que producto de la crisis social que atraviesa Chile, la Prueba de Selección Universitaria (PSU) se postergara dos veces, los postulantes se han visto expuestos a mayor ansiedad e incertidumbre.
El pasado jueves, el Consejo de Rectores (CRUCh) en conjunto con el Ministerio de Educación y el Departamento de Evaluación, Medición y Registro Educacional (DEMRE) de la Universidad de Chile anunciaron que la fecha de rendición de la PSU se aplaza para el 6 y 7 de enero de 2020.
Originalmente la PSU estaba programada para el 18 y 19 de noviembre, sin embargo, desde el CRUCh indicaron que el cambio en el calendario "busca que los y las estudiantes puedan rendir las pruebas en un contexto de mayor tranquilidad y tengan la posibilidad de desplazarse a los lugares de rendición elegidos por ellos(as) sin dificultades”.
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La espera se hace más larga para aquellos jóvenes que quieren ingresar a alguna de las 41 universidades que participan del Sistema Único de Admisión.
En ese sentido, Beatriz Rivera, directora nacional de orientación del Preuniversitario Pedro de Valdivia, señala que "una segunda modificación en la fecha de la prueba puede generar mucha ansiedad e incluso frustración".
Por su parte, el director académico del preuniversitario, Alonso Morgado, agrega que "si bien estos cambios de fecha generan ansiedad y estrés en los jóvenes, hay que mirarlo positivamente, ya que es una oportunidad para prepararse mejor".
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¿Qué hago? ¿Sigo estudiando? ¿Cómo manejo la ansiedad?
Rivera indica que "es muy recomendable que los jóvenes sigan una serie de estrategias que permitan manejar estos factores y ayudar a cuidarse y prepararse en este momento de contingencia tan agitada". "Se recomienda establecer un objetivo medible y realista", agrega.
Asimismo, la experta hace énfasis en tener en cuenta la realidad de cada alumno al momento de aplicar las estrategias de estudio, tales como generar espacios de tranquilidad y disminuir progresivamente la exposición a medios de comunicación y redes sociales.
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"Hay que continuar estudiando estratégicamente, repasando las unidades que sean de base para otras o donde el estudiante este con más dificultad. Se debe aprovechar el tiempo, repasando, ejercitando y resolviendo ensayos, ojalá unas tres horas diarias como mínimo", dice Morgado. "Hay que conocerse y fortalecer los puntos débiles", recalca.
Por último, Rivera aclara que también hay que dedicar tiempo para el ocio. "El balance entre las dos actividades puede ayudar a cumplir los objetivos. Las fiestas de fin de año son un muy buen momento para compartir en familia y distraerse, pero sin excesos", concluye.
16/11/2019
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