La ONU estableció este 21 de mayo para crear consciencia de la importancia cultural de esta infusión. Se trata de una bebida milenaria que no ha dejado de reinventarse con numerosas variedades para satisfacer el paladar de sus curiosos consumidores.
Cada 21 de mayo se celebra el Día Internacional del Té, con el objetivo de crear conciencia sobre su importancia cultural y económica en todo el mundo; promover acciones a favor de la producción y el consumo sostenible de esta bebida milenaria y concientizar sobre su relevancia en la lucha contra el hambre y la pobreza.
¿Pero por qué se celebra en mayo y no en otro mes? La ONU decidió que fuera en esta fecha, ya que coincide con que es la temporada en que comienza la producción de té en la mayoría de los países productores de este histórico bebestible.
Lo anterior ha generado que la industria crezca y se renueve, apuntando a un público que cada día consume más de estas infusiones en Chile y Latinoamérica, ya no ofrecen solo el clásico té negro; sino también nuevos blends (mezclas), infusiones y tipos de tés.
“Los tés más consumidos en Chile son en formato de bolsitas, en especial el té negro de Ceylon, sin aditivos, fabricados principalmente en Sri Lanka. En tanto, el Masala Chai se ha posicionado rápidamente en el mercado. Este un té negro con pimienta, cardamomo, nuez moscada y jengibre que gusta mucho a los paladares chilenos. Así como también los té con sabores frutales, especialmente, los de frutos rojos”, señala Solange Treguear, sommelier de Té Basilur en Chile.
La experta agrega que “luego se encuentran los tés más de especialidad, los cuales son consumidos por un público específico, como es el caso del té Oolong, Matcha y tés verdes. Y finalmente están las infusiones de manzanilla y menta, a las cuales se les han sumado las infusiones de moringa, rooibos y cúrcuma”.
Según la historia, el té se descubre hace más de 5 mil años en China, cuando el emperador Shen Nung, que sólo tomaba agua hervida por razones de salud, estaba calentando un poco de este líquido debajo de un árbol, sopló una fuerte brisa y algunas hojas cayeron en el interior del recipiente.
El emperador vio cómo las hojas teñían el agua, pero lo que más le fascinó fue el sabor y aroma que le dio. Nadie sabe si esta historia es totalmente fidedigna, pero lo que sí está claro es que cada día hay más tipos diferentes de té. ¿Qué diferencia a cada uno?.
Treguear explica que “los tés blancos son los tés con menos procesos, se cosecha a primera hora en la mañana y se deja secar al sol, no se rompen ni enrollan las hojas para evitar su oxidación. Mientras que el té verde es ligeramente oxidado -hasta un 20%-, el proceso se detiene con calor, obteniendo un color verdoso-amarillento. Éste es ideal para acompañar pescados crudos, pastas y ensaladas”.
En cambio, el té negro está completamente oxidado y se puede encontrar en distintas mezclas como el Earl Grey (té negro con bergamota) o con caramelo. Es un té para tomar a diario, tanto frío como caliente, y queda muy bien con comidas pesadas, dulces y postres.
La nutricionista Catalina Miranda, explica que “esta bebida natural tiene una gran cantidad de antioxidantes que retrasan el envejecimiento, además de proteger a las células y tejidos de los radicales libres. Así como también posee una alta cantidad de flavonoides que ayudan al sistema inmune, L-Teanina que potencia la concentración cerebral, y por último contiene teína, que activa a las personas y combate el cansancio”.
“Otro beneficio del té es que es un diurético natural que favorece la eliminación de toxinas de nuestro cuerpo. Además no contiene calorías, salvo que lo endulcemos, pero en general es un buen aliado para tomar un bebestible caliente en estos días de frío y calmar la ansiedad gracias a su alto poder de saciedad, sobre todo el Masala Chai”, añade Miranda.
Algunos tés que serán tendencia en este otoño-invierno 2022 son el Earl Grey, que se caracteriza por ser un blend tradicional inglés de té negro de Ceylán con aceite de bergamota.
También los tés frutales, los cuales son cada día son más consumidos por los chilenos, especialmente, los tés con sabor a frutos rojos, como frutilla, cherry, e incluso otros más novedosos como mango, piña, naranja, entre otros.
En esta línea también se encuentra Caramel Dreams. Este es “un blend o mezcla de té negro de Ceylán con notas de caramelo, toffee y miel que seguramente se transformará en el favorito de esta temporada”, indica Treguear.
Finalmente, otro té que estará pegando será el llamado té de otoño, que es té negro con miel de arce, blend ganador del Festival Great Taste 2022 realizado en Inglaterra.
Sin duda el té es un bebestible que tiene que estar presente en todas las cocinas chilenas, por su versatilidad y múltiples beneficios para la salud.