El joven efectivo policial recibió un disparo en el pecho muy cerca del corazón, sufriendo una herida que terminaría con su vida.
Lunes 19 de junio de 2017 | 22:44
El 28 de febrero de 2017 un teniente de Carabineros fue baleado en la comuna de San Joaquín. Los servicios de asistencia llegaron rápidamente. A pesar del gran profesionalismo de los paramédicos del SAMU, el efectivo policial no sobrevivió.
Un disparo alojado en el pecho del policía, específicamente en el costado del corazón. Si bien el equipo de especialistas logró llevarlo al hospital, poco se sabe de su pena y frustración al saber que su 100% no llegó a salvarle la vida a los ciudadanos. "No podemos demostrar nuestros sentimientos frente a los pacientes", comentó Luis Cabrera, asistente por más de 18 años de la comunidad.