De universitario a rival de Djokovic: La historia de Ben Shelton, el chico sensación del US Open
Nacido en Atlanta, el zurdo de 20 años se ha convertido en la sensación del último Grand Slam del año y apunta a dar el gran batacazo ante el multicampeón serbio.
Miércoles 6 de septiembre de 2023 | 13:10
Brazos en alto y un grito de desahogo. Así celebró Ben Shelton (47°) su victoria ante Frances Tiafoe (10°), a quien derrotó por 6-2, 3-6, 7-6 (7) y 6-2 por los cuartos de final del US Open.
Con solamente 20 años, el nacido en Atlanta es la gran esperanza del público para que un local vuelva a celebrar en el último Grand Slam del año, luego de que Andy Roddick lo hiciera por última vez el 2003.
El zurdo no solamente ha llamado la atención por su tenis y su espectacular saque, sino también por su carisma y su historia, la que está plagada de anécdotas.
Ben Shelton, universitario y amante del fútbol americano
El nuevo héroe de Flushing Meadows lleva el tenis en la sangre. Es hijo de Bryan Shelton, ex 55° de la ATP que llegó a ganar un par de títulos a principios de los 90.
Ben tomó su primera raqueta a los 10 años y a los 12 comenzó a participar en torneos menores. Al mismo tiempo, practicaba el fútbol americano, donde se destacó como quarterback por su gran capacidad de lanzamiento.
Su gran rendimiento en la Universidad de Florida le hizo dar el salto al profesionalismo, teniendo un ascenso meteórico que le permitió disputar la edición pasada del US Open.
Si bien perdió en primera ronda, continuó mejorando y en el Australian Open de este año dio el primer gran golpe al vencer a Nicolás Jarry en sets seguidos en la segunda fase, alcanzando los cuartos de final.
La gran arma que tiene Shelton es el servicio, lo que complementa con una increíble capacidad atlética que le ayudarán a meterse por primera vez entre los 20 mejores del orbe.
Ahora, el norteamericano tendrá un desafío mayúsculo ya que se enfrentará en las semfinales nada menos que a Novak Djokovic (2°), duelo que se disputará este viernes en un estadio Arthur Ashe que promete ser una caldera.