Quedó en silla de ruedas: Mujer pierde cobertura de salud tras tres años de tratamiento sin resultados
La vida de Jessica Quintanilla tuvo un giro de 180 grados luego de sufrir un accidente en una micro hace tres años cuando se dirigía a su trabajo. Ella solicita justicia ante el Instituto de Seguridad Laboral, quienes le ayudaron a cubrir los gastos de un complejo diagnóstico pero que, ahora le han negado seguir con la cobertura de salud.
Martes 25 de enero de 2022 | 18:40
El diagnóstico tras el accidente
El 15 de febrero de 2019, Jessica se dirigía a la cafetería en Viña del Mar donde trabajaba cuando ocurrió el hecho. “Mi jefa me dijo que tenía que ir a la Clínica Reñaca, que ahí tenía el convenio. Fui y me dieron 15 días de licencia, en ese momento lo tomé como algo leve”, relató Jessica. Al pasar los días, su pierna seguía inflamada por lo que se dirigió al Instituto de Seguridad Laboral (ISL) a dejar una declaración y con ello, fue derivada a otro centro pues su estado de salud seguía igual. “Me vieron muchos doctores, me hicieron exámenes y cosas, nunca tuve un diagnóstico así que me mandaron a Santiago para conseguir una respuesta”. Lee también: Pasajeros cuentan el drama que vivieron: ¿Qué hacer cuando se incendia el bus en el que vas de viaje? “Tu tienes síndrome regional complejo” le dijo un doctor en Santiago a manera de diagnóstico, ante lo que Jessica respondió con una carcajada. "No te rías, búscalo en internet y hablamos" le dijo el médico a la mujer, quien nunca había escuchado de ese tipo de dolencia.El síndrome de dolor regional complejo puede afectar a un brazo o una pierna y suele desarrollarse después de una lesión, una cirugía, un accidente cerebrovascular o un ataque cardíaco. El dolor es desproporcionado en relación con la gravedad de la lesión inicial, explican en la web de la Clínica Mayo de Estados Unidos.
Desde ahí, la trabajadora pasó por varios tratamientos: bloqueos de columna, agujas, filtraciones, estimulación eléctrica, entre otros. La situación empeoró cuando le pusieron un yeso y le comunicaron que le amputarían la pierna adolorida. Lee también: Pacientes con insuficiencia renal se oponen a ser derivados a nuevos centros de diálisis: "Están violando nuestros derechos" “Me hospitalizaron con el yeso, llamaron a mi papá, a mi tía, a mi marido e hijo y los prepararon mentalmente con psicólogos y psiquiatras. A mi me llevaron con una persona a quien ya le habían cortado su pierna para que él me contara su experiencia de amputación, incluso me mostraba como se ponía la prótesis y yo le preguntaba todas mis dudas antes de una amputación”, contó Jessica. Pese a la preparación familiar, la operación nunca llegó. Hasta el día de hoy, la mujer no sabe por qué no le dieron una explicación de la decisión tomada. “Experimentaron con mi señora”, comentó Claudio Vega, esposo de Jessica. “Pasé meses preparándome para una amputación. Ya hemos sufrido harto con mi familia”, concretó. El doctor David López explicó a Chilevisión Noticias que una amputación no es una indicación para ese tipo de síndrome. “Un trauma muy grave que no se amputó en el inicio, puede dejar secuelas graves entre ellos un síndrome regional complejo”, indicó el experto. Lee también: Denuncia de paciente reveló falta de oncólogos en el Hospital Félix Bulnes