Juana Vargas, será investigada por 90 días luego que el fiscal Patricio Toro en Viña del Mar, determinara que la dueña del hogar de ancianos habría realizado apropiación indebida, ya que si su esposo, Emiliano Pérez de 94 años, falleciera sería acreedora de una herencia cercana a los 1500 millones de pesos.
Vargas se convirtió en su heredera tras contraer matrimonio con el anciano a quien cuidaba durante tres años, ya que éste no tiene hijos, entregándole la posibilidad de quedarse con todos su bienes. "Decidimos casarnos luego que él hizo todo los procesos cuando estaba hospitalizado en el hospital Naval con un notario", aseguró Juana.
"Él dijo que era para protegerme, porque sabía que podía pasar cualquier cosa y la familia podía tomar la decisión de revocar esos testamentos y Emiliano no quería eso. Él no quería nunca dejarle nada a ellos (...) siempre pensó en protegernos a mí y a mis hijos", dijo la acusada de apropiación indebida.
Fue acusada por las sobrinas del hombre de la tercera edad, quienes aseguran que la mujer quiso aprovecharse de las facultades mentales seniles de Emiliano Pérez. Juana Vargas ya habría gastado 300 de los 1500 millones que heredaría. "se hizo un testamento donde ella era la beneficiaria y después se cambió y se colocó como una heredera universal, luego vino un casamiento en circunstancias no muy normales, con una firmas e tío Emiliano que no están bien" dijo Roxana Cartes, sobrina nieta de Emiliano Pérez.
