Según información de la policía del país australiano, el autobús habría estado regresando de una boda. Frente a esta situación, el primer ministro, Anthony Albanese, manifestó su pesar por "la naturaleza inimaginable de esta tragedia".
(EFE) - Durante la jornada de domingo,
al menos diez personas murieron y otras 25 resultaron heridas tras el volcamiento del autobús en el que viajaban, en la localidad de Greta, a unos 180 kilómetros de la ciudad de Sídney, en
Australia.
Según explicaron en un comunicado emitido desde la policía de la región de Nueva Gales del Sur,
el suceso ocurrió alrededor de las 23.30, en una rotonda de Greta, situada en una turística zona vitivinícola de Hunter Valley.
La comisionada asistente interina de la institución policial,
Tracy Chapman, dijo que unas 25 personas fueron transportadas, dos de ellas en helicóptero, a diversos hospitales
"con heridas de diversa consideración".
Sin embargo,
no se entregaron detalles de las identidades ni edades de las víctimas mortales ni los heridos, aunque aclaró que no hay menores.
"Tengo entendido que
(los pasajeros) habían estado juntos en una boda" y aparentemente se dirigían a sus alojamientos, precisó Chapman, en declaraciones a periodistas, recogidas por la cadena pública australiana
ABC.
También, la jefa policial informó de que
el conductor, un hombre de 58 años, ha sido arrestado por este accidente, cuyas causas se desconocen debido a que las investigaciones están en su etapa preliminar.
En tanto, Chapman señaló que "potencialmente"
puede haber gente atrapada debajo del autobús, en cuyo accidente, al parecer, no estuvo implicado otro vehículo.
Por su lado, el primer ministro australiano,
Anthony Albanese, manifestó hoy en Camberra su pesar por "la naturaleza inimaginable de esta tragedia", que
tornó la celebración de una boda en un día "cruel, triste e injusto" con "tan terribles pérdidas de vidas humanas y heridos"