Para la investigación se analizaron los datos anónimos de alrededor de cuatro mil mujeres en una aplicación de seguimiento de fertilidad, con un rango etario de entre 18 y 45 años, y que no utilizaban anticonceptivos hormonales.
En medio de los procesos de vacunación contra el COVID-19 que se llevan a cabo en diferentes países, surgen cuestionamientos y teorías -principalmente en redes sociales- respecto de los efectos en la salud que estas dosis podrían provocar. Para hacer frente a ello, un estudio publicado en Obstetrics & Gynecology, revela cuáles son las implicancias de esta inoculación en el ciclo menstrual de las mujeres.
Precisamente, la investigación desarrollada por científicos de Estados Unidos, recogió antecedentes de 3.959 usuarias (2.403 vacunadas y 1.556 no vacunadas) de la aplicación Natural Cycles, utilizada para registrar el periodo menstrual. De esa manera, se pudo evidenciar que en la mayoría de los casos analizados se lograba observar un cambio de menos de un día en la duración del ciclo en comparación a los anteriores previos a la inoculación.
Es decir, se aprecia un leve retraso en el inicio del ciclo consiguiente producto de esta alteración de un día, aproximadamente.
Lee también: Desde este lunes: ¿A quiénes les corresponde recibir la cuarta dosis contra el COVID-19?Cabe indicar que, según precisa el estudio, "cualquier cambio de menos de ocho días está clasificado como normal por la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia".
Dentro de ese marco, hay que considerar además que las personas que menstrúan también pueden presentar alteraciones de la ovulación de forma esporádica o provocada por el estrés, lo que afecta directamente en un cambio temporal de la duración del ciclo o simplemente provocar un ciclo saltado.
Por otro lado, los periodos generalmente duran 28 días, sin embargo, esto varía entre las mujeres e incluso puede cambiar durante la vida de una persona. Por tanto, son datos no constantes que además deben ser considerados en la cotidianidad y no por ello asociarlos a la vacuna.
Tal como se indicó, para realizar esta investigación se analizaron los datos anónimos de alrededor de cuatro mil mujeres en una aplicación de seguimiento de fertilidad, con un rango etario de entre 18 y 45 años, y que no utilizaban anticonceptivos hormonales.
De ese grupo, 2.400 correspondían a personas vacunadas, de las cuales en su mayoría recibieron la dosis de Pfizer (55%), Moderna (35%) y Johnson & Johnson (7%). Para el estudio también se contemplaron 1.556 personas no inoculadas, a fin de realizar la comparación entre ambos grupos.
Lee también: IHU, la nueva variante del COVID-19 que tiene 46 mutacionesPara las personas que sí recibieron su dosis contra el COVID-19, se tomaron en consideración los datos de tres ciclos mensuales consecutivos antes de la vacuna y los otros tres ciclos seguidos, incluyendo aquellos que ocurrieron en el periodo de la inoculación.
Fue así como se logró promediar que, luego de la primera dosis, hubo en general un aumento de 0,64 días en la duración del ciclo menstrual. Mientras que con la segunda dosis, hubo un alza de 0,79 días en comparación con quienes no habían recibido la vacuna.
Como conclusión de la investigación, los científicos expusieron que "nuestros hallazgos son tranquilizadores; no encontramos ningún cambio clínicamente significativo a nivel de población en la duración del ciclo menstrual asociado con la vacunación COVID-19".
"Las personas que reciben dos dosis de la vacuna COVID-19 en un solo ciclo parecen experimentar un cambio en la duración del ciclo más largo pero temporal. La vacunación contra la enfermedad del coronavirus 2019 (COVID-19) no está asociada con cambios en la duración de la menstruación", sentencian en el escrito.