En una oficina de Providencia operaba una fundación que cultivaba cannabis para fines medicinales. Tras una denuncia por parte de vecinos debido al fuerte olor que se percibía y luego de obtener una orden judicial, Carabineros fue hasta el lugar en donde encontró gran cantidad de plantas de marihuana, en modalidad indoor y exterior, por lo cual se procedió a incautar alrededor de 700 matas. "El recinto no cuenta con autorización para cultivar", fue lo que expresó funcionario de Carabineros. Por su parte, desde la corporación aclararon que ellos cultivan para un circuito cerrado de personas con receta médica y argumentó que "la ley nos certifica".