Un difícil vivir es el que tienen un grupo de habitantes de un edificio en Independencia, quienes denuncian serios problemas de convivencia comunitaria. Carabineros ha debido intervenir en varias ocasiones y se sienten de manos atadas, ya que por las medidas de la ley sanitaria actual, no pueden expulsarlos de la propiedad que arriendan y adeudan.
“Escándalos a media noche, entre familiares. Los vecinos no pueden dormir. Me han amenazado de muerte y han ido a mi domicilio a amenazarme. Me han dicho que me pueden hasta matar”.
Estos son relatos de un par de habitantes de un condominio que se sienten completamente atemorizadas por la situación que ahí se vive. Las amenaza nos son de delincuentes que hayan intentado un asalto, sino que de sus propios vecinos.
El origen de la violencia, acusan, proviene de una familia a quienes ellos les arriendan un departamento, y que son extremadamente agresivos, sembrando pánico en un edificio de la comuna de Independencia.
La denuncia contra estas personas incluye, entre otros hechos, la celebración de fiestas hasta largas horas de la madrugada, golpizas a conserjes, amenazas de muerte a vecinos así como a trabajadores del edificio.
Lee también: “Esta es mi casa, no me la pueden quitar”: Dueños de viviendas se enfrentan a arrendatarios morososA todo eso se suma la morosidad en pagos de meses de arriendo, gastos comunes y las deudas en cuentas de servicios como luz y agua.
“Son bastante conflictivos y llegan a la hora que quieren, 5 ó 6 de la mañana. Arremeten contra los guardias y hacen bulla”, delata Yuli Ramírez, quien es precisamente la propietaria del inmueble arrendado por los vecinos conflictivos.
Por su parte, María del Pilar Piamba, afirma la situación va de mal en peor: “No sólo es que no paguen, sino que ahora son los problemas con riñas familiares, que no dejan dormir a los vecinos y las amenazas, las peleas…”
Ha llegado a tal punto el conflicto de estos sujetos, que Carabineros ha debido acudir en varias ocasiones para controlar los disturbios. Sin ir más lejos, la madrugada de este lunes hubo un nuevo escándalo donde la fuerza policial tuvo que intervenir.
El capitán Renán González de la 9ª comisaría de Independencia señaló que detuvieron a una persona por desorden en la vía pública y que se encontraba en evidente estado de ebriedad, además de incumplir el toque de queda.
En tanto, María del Pilar expresó que incluso han intentado razonar con una de las moradoras problemáticas, pidiéndole que por favor entregue el inmueble, pero sin respuestas favorables: “Me responde con audios de amenazas e insultos, por lo que no hay forma de tener una comunicación o tratar de llegar algún acuerdo de nada”, afirmó.
Lee también: Amenazas incluso con armas: Cada media hora se registra un caso de violencia intrafamiliarLeyla Arriagada es el nombre de la arrendataria sindicada como responsable de los problemas, con la que el equipo de CHV Noticias intentó contactarse, pero fue imposible debido a la negativa y a los insultos con que fue recibida la periodista por parte de sus familiares.
Cabe recordar que durante la pandemia, son varios los tribunales que han suspendido los desalojos y embargos en contratos de arrendamiento, lo que ha dejado de brazos cruzados a los propietarios.
Sin embargo, se debe tomar un paso inicial, que es lo que explicó Aníbal Ahumada, presidente de Administradores de Chile: “Lo primero que hay que hacer es que el comité de administración, en conjunto con el administrador, solicite a través de una carta formal del propietario, el término del contrato”.
“Para tal efecto, es necesario acudir al juzgado de policía local para pedirle al tribunal competente que designe o instruya a que se haga un desalojo por parte estas personas”, agregó Ahumada.
Finalmente y tras la denuncia, la dueña reveló haber seguido recibiendo amenazas de muerte a través de mensajes de texto, lo que indica que a estos deudores conflictivos poco les importa ser delatados y que, por lo demás, aquellas evidencias sean presentadas ante un tribunal de justicia.