10/10/2020
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"Para mitigar esta situación, los equipos de seguridad de Metro están coordinados permanentemente con Carabineros, con quienes además se realizan intervenciones focalizadas en las estaciones más criticas", asegura el gerente de división de Metro de Santiago, Robert Sprätz.
Productos que por años se han vendido en las líneas del Metro de Santiago mediante el comercio ambulante. Un rubro que ha traído más de algún conflicto con autoridades y que ha vuelto en medio de la pandemia.
"Dejé de trabajar en marzo y hace dos semanas que estoy de nuevo, porque me cuidé y ahora como dieron más libertad, volví a trabajar", relata Verónica Guzmán.
Verónica lleva más de tres años trabajando como comerciante ambulante en el Metro. Lo que más quería era volver, ya que se trata de su fuente de ingreso. Lo más complicado es la confianza de los clientes, que se fue cuando llegó la pandemia.
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Dentro del reglamento para el Transporte y Tránsito de personas del Metro de Santiago, el comercio ambulante se estipula como una práctica prohibida. El artículo 9 prohíbe el comercio ambulante y el artículo 10, las colectas, ventas u ofrecimientos de cualquier bien o servicio.
Las fiscalizaciones deberán ser reforzadas por el escenario actual, asegura el gerente de división de Metro de Santiago, Robert Sprätz. "Para mitigar esta situación, los equipos de seguridad de Metro están coordinados permanentemente con Carabineros, con quienes además se realizan intervenciones focalizadas en las estaciones más criticas", sentencia.
Lee también: Pese a inicio de cordones sanitarios: Más de 90 mil vehículos han salido de la capital"Adicionalmente, y en el contexto actual de la pandemia, se realizan junto al Seremi de Salud fiscalizaciones del uso de mascarilla en accesos", agrega.
Junto con el comercio ambulante, la música en el Metro en una de las principales actividades informales que se llevan a cabo dentro de los vagones, en donde la necesidad por generar ingresos supera el miedo a la exposición.
Un fenómeno que no es para nada nuevo y que a pesar de la alerta sanitaria, ha vuelto a cobrar vida, bajo la misma necesidad y con mayores complicaciones.
