Desde el inicio de la invasión rusa, Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Holanda, Alemania, Canadá, España y Suecia, entre otros han anunciado el envío militar a territorio ucraniano. El embajador ruso Vasili Nebenzia señaló al respecto que están "echando leña al fuego".
"Vemos cómo se siguen suministrando armas de toda ralea (a los ucranianos) por parte de capitales occidentales... el hecho de poner armas en manos de civiles, ¿saben los occidentales el riesgo que representa para su propia seguridad, cuando misiles tierra aire y lanzagranadas caigan en manos de cualquiera?", advirtió el embajador.
Nebenzia aludió específicamente al anuncio ayer del presidente Joe Biden de que Estados Unidos suministraría drones, misiles antiaéreos, proyectiles antiblindados y armas de fuego con sus municiones por un valor de 800 millones de dólares.
Lee también: Rusia consideró “inaceptable” que Joe Biden acusara a Vladimir Putin de ‘criminal de guerra’No es el único país en hacerlo: otros como el Reino Unido, Francia, Holanda, Alemania, Canadá, España y Suecia, entre otros también han anunciado el envío de armas y equipamiento militar a Ucrania.
"Lamentablemente, Ucrania no es sino un peón en el tablero de Occidente", dijo el embajador, que dedicó su intervención a denunciar lo que llamó campaña de desinformación de los medios occidentales, principalmente en lo referente a la ciudad de Mariupol, que ha sufrido los ataques más duros en esta guerra y que es "objeto de gran número de mentiras".
Según el embajador ruso, todas las informaciones aparecidas en medios occidentales sobre el bombardeo a edificio civiles como la Maternidad de Mariupol o su teatro ocultan el hecho de que en ellos se habían supuestamente atrincherado miembros del ultraderechista Batallón de Azov.
Lee también: Autoridades ucranianas denuncian que más de 50 personas murieron tras nuevo bombardeo ruso en ChernigovY fue más lejos al acusar a las fuerzas ucranianas de dificultar a propósito la evacuación de civiles con el fin de "utilizarlos como escudos humanos".
Previamente a la larga intervención de Nebenzia, los embajadores de países occidentales habían acusado a Rusia no solo de atacar deliberadamente objetivos civiles, sino de tratar de utilizar las tribunas del Consejo de Seguridad para practicar el "cinismo" de plantear su propia resolución planteada para "respetar los principios humanitarios" en la guerra que Rusia llama "operación especial".