Tras la paralización del turismo debido a la emergencia sanitaria, los habitantes de la localidad se han visto imposibilitados de trabajar y generar ingresos. Gracias a la nota televisiva, no obstante, se generó una campaña para reunir alimentos y abrigo que ayuda a más de 400 personas.
"Esto es todo lo que tenemos para hacer comida, un repollo... una lechuga... un zapallo" contaba entre sollozos Rosa Encina, presidenta de la junta vecinal Villa La Cruz de Pomaire, donde diariamente más de 400 personas reciben comida y abrigo.
Producto de la pandemia, varios locatarios -desde artesanos a temporeros- se han visto imposibilitados de trabajar y generar ingresos. Las calles que antes rebosaban de turistas hoy están vacías, lo que ha dejado a las personas sin recursos.
El jueves pasado, cientos de vecinos se quedaron sin almuerzo, por lo que se inició una campaña para ir en su ayuda, lo que arrojó positivos resultados, ya que aseguran podrán continuar con esta labor al menos un mes más.
Lee también: Calles vacías y falta de alimentos: La preocupante situación de las y los vecinos de Pomaire"Yo le agradezco mucho a Chilevisión, porque sin esto que hicieron, yo creo que no habríamos podido continuar haciendo la olla común", aseguró Rosa.
"Vimos el reportaje en las noticias y a nuestro amigo Gustavo se le ocurrió hacer un aporte y traérselos personalmente a ustedes", aseguró un grupo de amigos que colaboraron con la iniciativa.
Atrás quedaron los días de turismo próspero gracias a la greda y la comida chilena. Hoy el escenario es desolador y con muchos vecinos sufriendo por el cierre de sus locales.
"Estamos sin trabajo, porque mi marido y yo trabajábamos en la greda, pero no tenemos ingresos de nada. Entonces esto es una gran ayuda", aseguró Brisa Macaya a CHV Noticias.
Aún así, solicitan ayuda en la recolección de pañales y ropa de abrigo ya que la situación es crítica.
Lee también: Entre cesantes se sacan adelante: El esfuerzo de la olla común de Los CopihuesNo es distinto el panorama en San Pedro de Atacama, que a diario recibía a miles de turistas de todo el mundo.
Hoy sus estrechas calles lucen vacías y el turismo está por el suelo.
"Mucha gente quebró, mucha gente tuvo que sacar sus cosas porque no podía seguir pagando", aseguran los vecinos.
El alto costo de los productos de primera necesidad también generó que se organizaran ollas comunes en el sector. Se estima que el 50% de los negocios, no sobrevivirán la crisis. A ello se suma una preocupante alza de contagios por COVID-19.
"Hay personas que no usan mascarillas, no hay ningún resguardo", explican.
Una alerta para las autoridades y un llamado a no olvidar estas localidades, otroras centros turísticos del país que están sufriendo gravemente las consecuencias de esta pandemia.