Hace unas semanas, la Policía ecuatoriana reveló un operativo que conmocionó a todo el país. Según informaron, una mujer de 24 años fue detenida por presuntamente intentar vender a su bebé de seis meses por medio de redes sociales.
Una transacción que se habría concretado, de hecho, el comprador sería un estadounidense, quien estaba dispuesto a pagar 100.000 dólares para quedarse con la guagua.
La situación llegó a ser investigada por el FBI y gracias a un agente encubierto que se contactó con la joven se pudieron reunir mayores antecedentes del hecho.
El comandante General de la Policía Nacional de Ecuador, Fausto Salinas Samaniego, informó en redes sociales la situación. “Aprehendimos a una ciudadana, quien a través de redes sociales estaría ofertando a un infante (hija) por una alta cantidad de dinero”, reveló.
Las autoridades del país allanaron la vivienda y rescataron al infante quien está bajo cuidado del Sistema de protección de niños para el restablecimiento de sus derechos.
Las especulaciones respecto al caso indican que la mujer podría pasar entre 16 y 19 años en prisión, ya que constituiría un delito de trata de personas, con la agravante sobre la vulnerabilidad de la víctima.
“Toda persona que capte, transporte, traslade, retenga o reciba; en el país, desde o hacia otros países con fines de explotación; para lo cual un tercero recurre a la amenaza, uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad, a la concesión o aceptación de pagos o beneficios, constituye delito de trata de personas”, menciona el artículo 91 del Código Orgánico Integral Penal.
