Los detalles de la confesión de Felipe Rojas sobre el crimen de Fernanda Maciel

El imputado por el homicidio de la joven habría relatado lo que sucedió el día de su desaparición en la bodega. "Dijo que comenzó a pasarse rollos" con una foto que él mismo le tomó, relató el abogado de la familia Maciel.

Martes 22 de diciembre de 2020 | 07:50

La confesión de Felipe Rojas, el único imputado por el homicidio de Fernanda Maciel, impactó a la familia de la joven y al país entero. El domingo 20 de diciembre, durante una reconstitución de escena, el sujeto habría revelado que el día de su desaparición la violó y la enterró viva.

El abogado de la familia, Pedro Díaz, reprodujo el relato de Rojas en conversación con Las Últimas Noticias, dando a conocer los detalles de la trágica jornada.

Según Díaz, el imputado "dijo que el 10 de febrero del 2018, él se contactó vía WhatsApp con Fernanda y se pusieron de acuerdo para juntarse en la bodega a fumar un pito de marihuana". Dijo que cuando Fernanda llegó, se sentó sobre unos sacos en el primer cuarto de la casa. Él se sentó al frente y se pusieron a conversar sobre temas en común.

“Mientras conversaban, este sujeto sacó una foto con su celular de las piernas de Fernanda, que andaba con vestido ese día. En ese momento, dijo que comenzó a pasarse rollos con la foto y a crear una suerte de obsesión sexual con ella”, aseguró el abogado.

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“Cuando Fernanda dijo que se iba, de acuerdo con el relato de Rojas, él se desesperó y dijo que no sabe qué le pasó, que se nubló porque pensó ‘se me va esta persona’. Entonces la tomó del cuello, la arrastró nuevamente hacia la bodega y la ahogó con su brazo hasta que ella quedó inconsciente. En el suelo procedió a violarla”, continuó el relato.

Después de eso, Rojas habría confesado que la amarró, la envolvió en unas telas y la metió en unos sacos: "se dirigió al fondo de la bodega donde había un hoyo listo de 70 centímetros, supuestamente dijo que era para botar escombros. Allí enterró el cuerpo, lo tapó con cal y tierra para al día siguiente cubrirlo con cemento”.

“Inmediatamente después de enterrar el cuerpo, según Rojas, se dirigió hasta la casa de Fernanda, se subió a la pandereta y comenzó a llamarla hasta que salió su madre. Ella le dijo que su hija no estaba, que había salido”, concluyó.