El segundo capítulo de Gran Hermano estuvo repleto de sorpresas y conflictos. Luego que una tarea crucial, como lo es la compra de alimentos, no resultara bien, las cosas se tensaron en el ambiente de la casa-estudio.
El conflicto inicio cuando Francisca Maira y Jennifer Galvarini fueron al supermercado para abastecerse de alimentos. Con el grupo acordaron cuáles debían ser los productos primordiales para gastar los $700 mil. Sin embargo, a las participantes se les acabó el tiempo y no lograron comprar lo necesario.
Ante la incertidumbre de si les alcanzará la comida para la semana, varios de los jugadores alzaron la voz para manifestar su molestia. Una de ellas fue Maite Phillips.
La joven de 22 años incluso fue un paso más allá y, ante la gravedad del error cometido por sus compañeras, decidió hacer uso de la nominación espontánea.
A diferencia de una nominación común, la primera persona votada recibirá tres puntos y el segundo, dos puntos. Por lo que Maite, en una decisión estratégica, le otorgó el primer y segundo puesto a Francisca y Jennifer.
"El hecho que hayan pasado las verduras primero y poca cantidad presiento que no vamos a tener comida de aquí al sábado, entonces entiendo el nerviosismo pero igual es algo que va a afectar mucho a la casa, que va a afectar el genio y la convivencia", argumentó.
