Hugo Reyes, hijo de Rosa Alejandra, indicó que lo último que se supo de ella se remonta al 21 de junio tras salir del trabajo, sin dejar ninguna pista de su paradero. Pero la versión de la pareja de su madre es lo que más llama su atención.
Rosa Alejandra Lira Saldías, de 53 años, se mantiene desaparecida desde hace más de un mes en la Región de Valparaíso. Un extraño caso del que su familia recién se enteró a mediados de julio, desconociendo los motivos detrás del extravío que los dejó en vilo.
Según han averiguado sus cercanos, el último contacto que se tuvo de Rosa Alejandra se remonta al 21 de junio, cuando salió de su trabajo como cuidadora de una adulta mayor en dirección desconocida y sin dejar ninguna pista de su paradero.
En conversación con Contigo en la Mañana, Hugo Reyes Lira, hijo de la mujer, entregó más antecedentes del enigmático suceso.
"Mi mamá era una persona muy humanitaria, siempre ayudaba, inclusive no teniendo los medios para hacerlo. Era muy alegre, muy trabajadora y muy buena trabjaadora. Donde trabajaba ella se hacia destacar, ayudaba", dijo Hugo al describir a su madre.
Continuando con su relato, explicó el tipo de comunicación que mantenían a la distancia, dado que él hace 10 años se fue a vivir a la Región del Biobío. En ese sentido, indicó que hablaban frecuentemente, pero a veces no era todos los días.
"Estos últimos dos años y medio más menos, la relación fue más distante porque había muchas cosas que no concordábamos. Ella me hablaba y me pedía cosas a las que yo no accedía, y que era dinero, y ella se enojaba y me dejaba de hablar uno o dos meses, pero siempre volvía", comentó.
Así recordó que la última vez que hablaron fue entre el 16 y 17 de junio, cuando él no notó nada extraño en la conversación. Y prácticamente días después ocurrió esta extraña desaparición.
De hecho, el 21 de junio es el último registro de actividad que tiene su WhatsApp.
Pese a que la desaparición se remonta hacia aquella fecha, Hugo reveló que recién este 22 de julio se enteró de todo.
"Aproximadamente como a las 7 de la tarde recibo el llamado de una tercera persona, que es amigo de mi mamá y su pareja, y me dice 'Oye, Hugo ¿Sabes lo que está pasando con tu mamá?' Y ahí me dice que lleva 30 días desaparecida".
Apenas recibió la alerta, Hugo comenzó a indagar en el asunto y se enteró de la versión de la pareja de su mamá, identificado como Ítalo, quien había decidio no reportar el extravío debido a una interesante razón.
"Según él (Ítalo), el arrendatario con el que viven en la parcela recibe un llamado de mi madre informándole que ella se iba a ir a Santiago. Solo eso, y le colgó. Y que iba a volver dentro de una semana", dijo Hugo.
"Y supuestamente por eso él (Ítalo) se había quedado tranquilo de que mi mamá se había ido", agregó Hugo, sospechando de esta versión.
"Yo conozco a mi mamá y sé cómo era, no me cabe en la cabeza de que ella se haya querido ir y desaparecer. Me parece sumamente extraño. Desde el momento que recibo el llamado de una tercera persona contándome, es extraño", enfatizó.